jueves, 25 de enero de 2007

Abraham Bomba

Shoah, film de Claude Lanzmann, 1985. Documental de nueve horas sobre el campo de exterminio de Treblinka. En uno de los testimonios un barbero explica como cortaba el pelo a otros judíos antes de que entraran a la cámara de gas. Tiene que parar. Llora. Pasan los minutos, no alcanza a explicar, a explicarse, como sucedió.

Ojeo un libro del mismo título. Tiene un prólogo de Simon de Beauvoir. Pocas páginas. Recuerdo al barbero llorando ante a la cámara, tiritando, no encuentro eso en el libro por ningún sitio. Leo sus palabras. Pero no puedo escuchar esas largas pausas, infinitas.

Nueve horas de testimonio oral no caben en doscientas páginas. Una existencia no puede ser recogida en un trozo de papel, acaso consiga hacerla más soportable.

1 comentario:

Miguel Prieto dijo...

¿Como lo hago para dejar un texto colgado?